Liliana Gelman muestra un profundo interés por las formas puras que la naturaleza le ofrece, la propia artista dice "Cada imagen que tomo del entorno natural, oculta una revelación de la estructura subyacente. Estas imágenes me sirven como notas del lenguaje de la naturaleza: un vocabulario visual que configura miles de formas." En Pájaros, cada rama muestra esas estructuras de las que habla la artista, quedando tan sólo un boceto del mundo natural, remitiendo a ese mundo soñado por Gelman.
En la serie Sueños, está latente el interés de la artista por el mundo onírico; el mar como el inconsciente es un terreno desconocido, infinito y maleable, donde todo se funde y se distorsiona; aquí, algunas formas se transmutan y ascienden al cielo como pájaros, todo es un escenario soñado, modulado por una artista que explora las inquietudes del sueño, los colores y las formas de la naturaleza en una misma obra.